Jesús Sagrario
















Antepón tus
necesidades a las
de tu entorno

Intuyo que, si has llegado a este artículo, es porque, en alguna medida, sientes que no estás respetando tus necesidades y que antepones las del resto de tu entorno a las tuyas propias.

Poner límites


Si este es tu caso, no desesperes ya que todo en la vida tiene solución.

Te invito a que te quedes hasta el final para así poder entender mejor por qué te sucede esto y como ponerle solución con unas claves esenciales que te permitan empezar a cuidar de tu propia necesidad.

Antepón tus necesidades a las de tu entorno

Intuyo que, si has llegado a este artículo, es porque, en alguna medida, sientes que no estás respetando tus necesidades y que antepones las del resto de tu entorno a las tuyas propias.

Si este es tu caso, no desesperes ya que todo en la vida tiene solución. Te invito a que te quedes hasta el final para así poder entender mejor por qué te sucede esto y como ponerle solución con unas claves esenciales que te permitan empezar a cuidar de tu propia necesidad.

¿Por qué antepones las
necesidades de los
demás a las tuyas?

Para responder a esta pregunta, primero quiero explicar que es una necesidad y como influyen en nuestra vida.

Todos hemos escuchado hablar de las necesidades, pero… ¿Sabemos realmente lo que encierra una necesidad?

Pues bien, existen diversos tipos de necesidades dependiendo en la etapa del desarrollo en la que nos encontremos y/o los recursos económicos, sociales y emocionales de los que dispongamos. Según la pirámide de Maslow tenemos los siguientes tipos de necesidades:

Pirámide Maslow


  • Necesidades fisiológicas:
  • Son aquellas necesidades más básicas que tienen que ver con lo fisiológico y la supervivencia.

  • Necesidad de seguridad:
  • Estas necesidades, provienen de la falta de seguridad y protección.

  • Necesidades de afecto y afiliación:
  • En este nivel nos encontramos con la necesidad de aceptación, de afiliación y asociación.

  • Necesidades de estima:
  • Las necesidades de estima están relacionadas con el reconocimiento, el aprecio y el estatus.

  • Necesidades de autorrealización:
  • Por último, el sentirse autorrealizada/o es algo que se relaciona con satisfacer necesidades de moralidad, creatividad, aceptación…

Y aunque existan diversos tipos de necesidades, todas son importantes y necesarias para tu felicidad.

Las necesidades encierran deseos y aversiones con respecto al entorno del que te ves rodeada/o.

Dependiendo el tipo de infancia que hayas tenido, las experiencias que hayas atravesado en tu vida y la personalidad que hayas desarrollado a lo largo de los años, te vas a encontrar con diferentes necesidades que bien pueden verse satisfechas o, por el contrario, quedar relegadas a un segundo plano y causarte desesperación interna.

Y ahora que tienes más claro qué es una necesidad y de dónde proviene, es importante

descubrir los posibles motivos que te han llevado a relegar tus necesidades a un lugar en dónde, la mayoría de las veces, se encuentran en última posición de ser escuchadas.




Ayudar a tu hijo/a

Probablemente cuando eras un niño/a y trataste de expresar lo que necesitabas en tus diferentes etapas del desarrollo, tu entorno más cercano no pudo cumplir con dichas demandas y, para poder sobrevivir

Y sentirte aceptada/o y querida/o, tomaste la decisión inconsciente de encerrar esas necesidades y/o deseos en una cajita

para desarrollar una personalidad que siempre estuviese atenta y dispuesta a las necesidades de los demás.

Y no se trata ahora de señalar culpables de que esta situación exista, ya que seguramente,

tus padres y/o cuidadores, no disponían de las herramientas necesarias para generar un entorno en el cual pudieses sentir que tu necesidad era importante y, por tanto, se viera satisfecha.
Lo que, si me parece relevante, es entender de dónde procede esta carencia con respecto al cuidado de tu necesidad y con el entendimiento, darte cuenta de que,

Aunque tu necesidad esté encerrada en una cajita, no quiere decir que no te esté afectando en tu vida y en tus relaciones:



Ayudar
  • Es probable que sientas que constantemente estás dispuesta/o a ayudar a los demás en lo que te pidan, pero que nadie lo hace por ti.
  • Seguramente sientes que tu entorno se aprovecha de tu disponibilidad constante.
  • Intuyo que te cuesta decir NO por miedo a entrar en conflicto.
  • Existe la posibilidad de que sientas enfado interior y que no lo estés expresando.
  • Puede que te sientas insatisfecha/o contigo misma/o y con tu entorno.

¿Por qué antepones las necesidades de los demás a las tuyas?

Para responder a esta pregunta, primero quiero explicar que es una necesidad y como influyen en nuestra vida.

Todos hemos escuchado hablar de las necesidades, pero… ¿Sabemos realmente lo que encierra una necesidad?

Pues bien, existen diversos tipos de necesidades dependiendo en la etapa del desarrollo en la que nos encontremos y/o los recursos económicos, sociales y emocionales de los que dispongamos. Según la pirámide de Maslow tenemos los siguientes tipos de necesidades:

  • Necesidades fisiológicas:
    Son aquellas necesidades más básicas que tienen que ver con lo fisiológico y la supervivencia.
  • Necesidad de seguridad:
    Estas necesidades, provienen de la falta de seguridad y protección.
  • Necesidades de afecto y afiliación:
    En este nivel nos encontramos con la necesidad de aceptación, de afiliación y asociación.
  • Necesidades de estima:
    Las necesidades de estima están relacionadas con el reconocimiento, el aprecio y el estatus.
  • Necesidades de autorrealización:
    Por último, el sentirse autorrealizada/o es algo que se relaciona con satisfacer necesidades de moralidad, creatividad, aceptación…

Y aunque existan diversos tipos de necesidades, todas son importantes y necesarias para tu felicidad. Las necesidades encierran deseos y aversiones con respecto al entorno del que te ves rodeada/o. Dependiendo el tipo de infancia que hayas tenido, las experiencias que hayas atravesado en tu vida y la personalidad que hayas desarrollado a lo largo de los años, te vas a encontrar con diferentes necesidades que bien pueden verse satisfechas o, por el contrario, quedar relegadas a un segundo plano y causarte desesperación interna.

Y ahora que tienes más claro qué es una necesidad y de dónde proviene, es importante descubrir los posibles motivos que te han llevado a relegar tus necesidades a un lugar en dónde, la mayoría de las veces, se encuentran en última posición de ser escuchadas.




Niño ayudado

Probablemente cuando eras un niño/a y trataste de expresar lo que necesitabas en tus diferentes etapas del desarrollo, tu entorno más cercano no pudo cumplir con dichas demandas y, para poder sobrevivir y sentirte aceptada/o y querida/o, tomaste la decisión inconsciente de encerrar esas necesidades y/o deseos en una cajita para desarrollar una personalidad que siempre estuviese atenta y dispuesta a las necesidades de los demás.

Y no se trata ahora de señalar culpables de que esta situación exista, ya que, seguramente, tus padres y/o cuidadores, no disponían de las herramientas necesarias para generar un entorno en el cual pudieses sentir que tu necesidad era importante y, por tanto, se viera satisfecha.

Lo que, si me parece relevante, es entender de dónde procede esta carencia con respecto al cuidado de tu necesidad y con el entendimiento, darte cuenta de que, aunque tu necesidad esté encerrada en una cajita, no quiere decir que no te esté afectando en tu vida y en tus relaciones:

  • Es probable que sientas que constantemente estás dispuesta/o a ayudar a los demás en lo que te pidan, pero que nadie lo hace por ti.
  • Seguramente sientes que tu entorno se aprovecha de tu disponibilidad constante.
  • Intuyo que te cuesta decir NO por miedo a entrar en conflicto.
  • Existe la posibilidad de que sientas enfado interior y que no lo estés expresando.
  • Puede que te sientas insatisfecha/o contigo misma/o y con tu entorno.






Claves para anteponer tus necesidades a las de los demás

• Aprende a decir NO

Decir NO es una habilidad que facilita el poner límites en tu vida. De alguna forma te ayuda a escuchar de forma directa a tu necesidad y saber cuándo sientes que no te apetece o no quieres hacer algo.

Es importante aprender a poner límites a las personas que se encentran a tu alrededor

ya que, si no lo haces, corres el riesgo de ser manipulada/o y con ello no estar respetando lo que verdaderamente deseas y/o necesitas en ese momento concreto.



Decir no

Y quizás te preguntes ¿Cómo empiezo a decir que no?

Pues bien, el primer paso es entender que es comunicarse de forma asertiva. El asertividad es la capacidad de expresar opiniones con firmeza y respeto, sin temer las posibles consecuencias que de ello se deriven. Para empezar a poner en práctica el asertividad y la colocación de límites a través del NO, es necesario que te centres en los siguientes aspectos:

  • No temas el entrar en un posible conflicto
  • y que con ello la persona se aleje. Quién te quiera de corazón, te va a acompañar en tu vida por lo que eres y no por lo que hagas.

  • Observa si eres tú quién siempre cede y,
  • si es así, comienza a negociar otras alternativas por las cuales exista un equilibrio.

  • Es importante que aceptes la posibilidad de que cuando comiences a poner límites y expresar tus necesidades,
  • existan personas de tu entorno que desaparezcan. Este hecho será un indicativo de que vas por buen camino.

  • No se trata ahora de que te vayas al extremo contrario,
  • es importante que priorices las necesidades más importantes para ti y sea en ellas en las que centres tu atención.

  • Te permite reencontrarte con lo que eres en esencia
  • y “llenar” ese vacío que sientes.

  • No es necesario que tengas que estar, constantemente, dando explicaciones
  • de porque haces o dices o quieres x o y cuestión. Será suficiente con que tu tengas clara esa necesidad.






Claves para anteponer tus necesidades a las de los demás

• Aprende a decir NO




Decir no

Decir NO es una habilidad que facilita el poner límites en tu vida. De alguna forma te ayuda a escuchar de forma directa a tu necesidad y saber cuándo sientes que no te apetece o no quieres hacer algo. Es importante aprender a poner límites a las personas que se encentran a tu alrededor ya que, si no lo haces, corres el riesgo de ser manipulada/o y con ello no estar respetando lo que verdaderamente deseas y/o necesitas en ese momento concreto.

Y quizás te preguntes ¿Cómo empiezo a decir que no?

Pues bien, el primer paso es entender que es comunicarse de forma asertiva. El asertividad es la capacidad de expresar opiniones con firmeza y respeto, sin temer las posibles consecuencias que de ello se deriven. Para empezar a poner en práctica el asertividad y la colocación de límites a través del NO, es necesario que te centres en los siguientes aspectos:

  • No temas el entrar en un posible conflicto y que con ello la persona se aleje. Quién te quiera de corazón, te va a acompañar en tu vida por lo que eres y no por lo que hagas.
  • Observa si eres tú quién siempre cede y, si es así, comienza a negociar otras alternativas por las cuales exista un equilibrio.
  • Es importante que aceptes la posibilidad de que cuando comiences a poner límites y expresar tus necesidades, existan personas de tu entorno que desaparezcan. Este hecho será un indicativo de que vas por buen camino.
  • No se trata ahora de que te vayas al extremo contrario, es importante que priorices las necesidades más importantes para ti y sea en ellas en las que centres tu atención.
  • Te permite reencontrarte con lo que eres en esencia y “llenar” ese vacío que sientes.
  • No es necesario que tengas que estar, constantemente, dando explicaciones de porque haces o dices o quieres x o y cuestión. Será suficiente con que tu tengas clara esa necesidad.


• Observa y no te
identifiques con tu
necesidad




Obsérvate

Una vez has aprendido a poner límites, decir que no y ser asertiva/o a la hora de expresar tu necesidad, es necesario que entiendas que, las necesidades están generadas por deseos y aversiones producidas por tu mente. Por lo tanto, esas necesidades NO son tú, aunque formen parte de ti.

¿Qué significa eso de que las necesidades no soy YO?

Significa que, como he dicho previamente, las necesidades se generan debido al tipo de desarrollo que hayas experimentado en tu vida, pero no eres tú en esencia por lo que no es muy eficiente el identificarse con ellas ni con los pensamientos asociados a estas. Por eso es importante que te des cuenta de cuáles son esas necesidades.

Es decir que abras la caja donde un día decidiste encerrarlas, las observes, las expreses con asertividad

para más adelante ser consciente de que habrá momentos en los cuales esas necesidades no podrán quedar satisfechas y no por ello tu autoconfianza y esencia deben quedar resentidas.

Libérate


Y quizás te preguntes ¿Entonces que diferencia existe entre aceptar que no siempre esas necesidades quedarán satisfechas y lo que venía haciendo hasta ahora de relegarlas a un segundo plano?

Pues bien, la diferencia primordial es que cuando están encerradas en una cajita y no son miradas ni expresadas, poco a poco te van generando sentimientos que debilitan tu autoestima y tu autoconfianza al mismo tiempo que vas generando una actitud de resignación y resentimiento con tu entorno y con la vida.

Mientras que cuando las observas, no te identificas con ellas y eres capaz de expresarlas con asertividad, tu confianza y valor intrínseco se ven reforzados dándote la capacidad de soltar esos deseos y aversiones, aceptando la vida tal y como se presenta.

Soy consciente de que esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero si te quedas atascado/a o ves que no puedes avanzar por ti misma/o busca la ayuda que mereces de un profesional.

Y si deseas que ese profesional sea yo y que te acompañe en tu proceso de reencontrarte contigo misma/o no dudes en contactar conmigo.


Jesús Sagrario
Psicólogo Experto en
Gestión y Regulación Emocional

•Observa y no te identifiques con tu necesidad

Una vez has aprendido a poner límites, decir que no y ser asertiva/o a la hora de expresar tu necesidad, es necesario que entiendas que, las necesidades están generadas por deseos y aversiones producidas por tu mente. Por lo tanto, esas necesidades NO son tú, aunque formen parte de ti.



Libérate


¿Qué significa eso de que las necesidades no soy YO?

Significa que, como he dicho previamente, las necesidades se generan debido al tipo de desarrollo que hayas experimentado en tu vida, pero no eres tú en esencia por lo que no es muy eficiente el identificarse con ellas ni con los pensamientos asociados a estas. Por eso es importante que te des cuenta de cuáles son esas necesidades. Es decir que abras la caja donde un día decidiste encerrarlas, las observes, las expreses con asertividad para más adelante ser consciente de que habrá momentos en los cuales esas necesidades no podrán quedar satisfechas y no por ello tu autoconfianza y esencia deben quedar resentidas.

Y quizás te preguntes ¿Entonces que diferencia existe entre aceptar que no siempre esas necesidades quedarán satisfechas y lo que venía haciendo hasta ahora de relegarlas a un segundo plano?

Pues bien, la diferencia primordial es que cuando están encerradas en una cajita y no son miradas ni expresadas, poco a poco te van generando sentimientos que debilitan tu autoestima y tu autoconfianza al mismo tiempo que vas generando una actitud de resignación y resentimiento con tu entorno y con la vida. Mientras que cuando las observas, no te identificas con ellas y eres capaz de expresarlas con asertividad, tu confianza y valor intrínseco se ven reforzados dándote la capacidad de soltar esos deseos y aversiones, aceptando la vida tal y como se presenta.

Soy consciente de que esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero si te quedas atascado/a o ves que no puedes avanzar por ti misma/o busca la ayuda que mereces de un profesional.

Y si deseas que ese profesional sea yo y que te acompañe en tu proceso de reencontrarte contigo misma/o no dudes en contactar conmigo.


Jesús Sagrario Psicólogo Experto en Gestión y Regulación Emocional





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